Una de las dudas que debe afrontar el bachiller respecto a su formación es elegir entre la universidad pública y privada. Ambas cuentan con importante infraestructura y algunas están trabajando en acreditaciones al Mercosur.
INFRAESTRUCTURA. Hace algunos años, las universidades privadas, a diferencia de la estatal, eran privilegiadas en cuanto a infraestructura. "El compromiso con la educación nos ha permitido invertir en infraestructura para brindar comodidad a los estudiantes", explicó Antonio Carvalho, Presidente de la Asociación Nacional de Universidades Privadas (Anup).
En contrapartida, la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (UAGRM), tenía una gran falencia en este aspecto. Aulas repletas de estudiantes, en algunos casos incluso con los vidrios quebrados eran las características.
En la actualidad, gracias a los recursos que recibe por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH), en la universidad moreniana se han construido modernos módulos siendo ahora una de las fortalezas de la institución.
"En los últimos dos años se ha invertido cerca de 5 millones de bolivianos en infraestructura y equipamiento para laboratorios sólo en la Facultad de Contaduría Pública", destacó José Luis Salvatierra, Secretario General facultativo.
Para Jenny Ampuero, docente de Ciencias de la Comunicación de la UAGRM, la competitividad entre las universidades privadas ha repercutido en la infraestructura; sin embargo, el aspecto académico está un poco descuidado.
Equipamiento. Por lo general, gran parte de las universidades privadas, en especial las que llevan varios años con determinada carrera, cuentan con laboratorios adecuados para la formación de los nuevos profesionales.
En la UAGRM aseguran estar a la vanguardia en el aspecto tecnológico. Facultades como Contaduría Pública cuentan en cada una de sus aulas con proyectores multimedia e incluso en días pasados inauguraron cinco aulas con pizarras virtuales. "Es esencial introducir las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) en el proceso de formación. Estamos en la era digital", destacó Salvatierra.
Según Ampuero, se ha avanzado bastante tanto en el tema de infraestructura en la universidad estatal y tecnología; sin embargo, reclama que no todas las carreras cuentan con lo último de tecnología. "En comunicación aún no contamos con las cámaras filmadoras necesarias y en algunos casos existen aulas con más de 100 alumnos", explicó.
ASPECTO ACADÉMICO. En este punto, el papel más importante lo tiene el docente.
"Por norma, cualquier profesional que desee dar cátedra en la UAGRM debe tener una Maestría en Educación Superior o en el área que dará docencia", explicó Salvatierra.
En contrapartida, las universidades privadas exigen un diplomado en Educación Superior. "Además, constantemente se realizan capacitaciones a los docentes", explicó el Presidente de la Anup.
Para Ampuero, el nivel académico en las universidades privadas es bajo y mucho tiene que ver con el costo que cobran a los estudiantes. "Algunas cobran una mensualidad menor que en los colegios particulares, lo que significa a su vez salarios bajos para quienes enseñan y cuando uno está mal pagado es difícil preparar un curso de calidad", explicó.
Para el Presidente de la Anup, los costos bajos tienen que ver con la ayuda económica del exterior que reciben algunas universidades.
ACREDITACIONES. Un aspecto que puede ser esencial a la hora de elegir una carrera son las acreditaciones. La UAGRM cuenta con dos carreras acreditadas al Mercosur. "Cualquier profesional que salga de estas carreras puede trabajar en un país miembro de este bloque sin problemas", explicó.
Las universidades privadas también van por ese camino. La UPSA, Utepsa y Católica iniciaron ese proceso.
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