La Universidad Pública de El Alto (UPEA) desarrolla al presente un programa de biofertilizantes, para mejorar el rendimiento de la producción agropecuaria en el altiplano del país. Los compuestos incorporan hojas de coca, lombrices y otros desechos orgánicos informó Tito Fuentes, responsable de la Carrera de Ciencias Agrícolas de la casa superior de estudios.
Al respecto, la bióloga Cecilia Gonzales que forma parte del equipo técnico del IBCE sostuvo que para lograr la recuperación de suelos en el altiplano es necesario desarrollar planes integrales, que hagan posible un manejo integral de las regiones productoras.
SEMILLAS
Señaló que los productores continúan en las zonas altiplánicas del departamento, trabajando con semillas producidas con métodos de polinización abierta, (métodos naturales), en tanto que las biotecnologías hacen posible que los mismos accedan a semillas mejoradas o híbridas.
En la visita efectuada al parque Kallutaca, el personal del IBCE advirtió la presencia de la crianza experimental de avestruces, conejos y ganado ovino, que pueden constituirse en fuentes alternativas de proteínas para la población, sostuvo.
MATERIA PRIMA
En el marco de la protección del medioambiente, Fuentes informó que el Viceministerio de Coca proporciona parte del arbusto utilizado para preparar los denominados bioabonos, que a través de varios procesos simples de fermentación y mezclas con desechos orgánicos, se convierten finalmente en abono natural, también llamado compost.
Otro aspecto que llamó la atención en el parque de la universidad, luego de la visita de personeros y personal técnico del IBCE, fue el cultivo de lombrices y fertilizantes líquidos, que se obtiene con el proceso.
Los trabajos que realizan los estudiantes y docentes, con apoyo de sus autoridades son todavía procesos primarios, ya que para desarrollar líneas de producción a mayor escala, necesitan disponer de recursos más amplios de investigación y tecnología.
LOMBRICES
El egresado de la Carrera de Agronomía, Javier Limachi, explicó el cultivo de lombrices, que por lo general se reproducen cinco veces y que a los 65 días llegan a la madurez.
De ese proceso también se obtiene fertilizante líquido, alrededor de 18 litros, que pueden servir para cubrir una hectárea. Este insumo, por lo general, se emplea en el cultivo de hortalizas. El producto no se comercializa por la mínima escala de producción. Se procede al intercambio con los productores de la región y de otras comunidades que lo necesiten.
CUNICULTURA
La Carrera de Zootécnica realiza también investigaciones en la crianza de conejos, para lo que tiene una variedad, los que son controlados mediante su peso, alimento e higiene.
Verónica Aliaga, una de las responsables de la investigación, informó que tienen en estudio seis variedades y que para su crianza se les proporciona alimento balanceado, además de vitaminas, así como agua tratada.
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