sábado, 26 de febrero de 2011

‘Al ver la invitación, nadie me reconocía’ Amalia Laura

—¿Cómo fueron estos cuatro años de estudio?
—Algunos docentes, no todos, tienen otra mentalidad, no aceptan que mujeres de pollera puedan estudiar en la universidad; me trataban mal, me decían empleadita, aunque otros sí me apoyaban.

—¿Fue difícil ingresar a la universidad?, ¿pagaste tus estudios?
—Logré ingresar con una beca PAE junto a otros compañeros de pueblos originarios. Para financiar mis estudios trabajé en el mercado 25 de Mayo con una señora que vendía comida. Cuando estaba en tercer año, mi papá me empezó a ayudar económicamente.

—¿Tienes relación directa con autoridades de Gobierno?
—La gente me conoce porque era líder. Entre el 2008 y 2009 he sido curaca del ayllu Aysoqa, sud de Potosí. En Sucre conocí a Célima Torrico y a Leonilda Zurita durante la Asamblea Constituyente; ellas no sabían que yo estaba estudiando.

—¿Por qué decidiste denunciar a tus compañeros?
—No era mi intención denunciar el hecho, no tenía valor. Cuando comencé a repartir invitaciones, no me reconocían en la foto; la compañera Célima al ver la invitación me dijo ‘no estás en la foto’; le mostré la otra foto y me dijo que eso no era justo. Un día en la plaza vi mi foto y me sentí mal, ni parezco yo. Me acerqué a Filomeno, camarógrafo de Canal 7, y lo invité (al acto); le dije que quería entrar tal como soy, que mi papá iba a llegar para el evento y si me obligaban a ponerme toga tal vez iba a pensar que he olvidado mis raíces. Después apareció otro compañero de radio Cepra, me he desahogado con ellos, pero no sabía que me estaban grabando y después aparecieron cámaras a mi alrededor.

—¿Qué pasó con la fotografía que pusieron en la invitación?
—Al momento de sacarnos las fotos, cinco compañeros me han exigido ponerme toga y birrete, yo no quería, a tanta insistencia me puse birrete y bufanda. Para la foto de la invitación, otra vez insistieron, no acepté, me la tomaron con pollera y blusa pero días después habían decidido montar la foto. He aceptado porque no me quedaba otra; pero no se veía bien. Mi hermana ha comprado blusa, pantalón y zapatos para que no tenga problemas, hemos ido al estudio y he insistido para que me saquen otra foto como querían mis compañeros y se cambie el fotomontaje que se quedó en el estudio. En el estudio he pedido que revele una foto donde estoy de pollera para mandarle a mi papá.


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