Grupos estudiantiles de la Universidad Pública de El Alto (UPEA) impusieron ayer a Mary Medina como nueva rectora de esa casa de estudios superiores y expulsaron al anterior titular, Federico Zelada. Hubo enfrentamientos y gasificación de la Policía.
El dirigente de la Federación Universitaria Local (FUL), Álex Paz, explicó a la red ATB que Zelada fue acusado de cometer irregularidades en la administración de fondos y que la nueva autoridad tendrá la responsabilidad de investigar la denuncia.
Desde la anterior semana hubo interrupción de las clases por las protestas organizadas por los opositores del anterior Rector. La situación se desbordó el miércoles, día en que los manifestantes tomaron por la fuerza el Rectorado.
Hubo destrucción de muebles y rotura de vidrios, pese a la intervención de la Policía, que utilizó agentes químicos para dispersar a los universitarios. Este jueves, luego de la salida de Zelada, también hubo enfrentamientos con palos y piedras entre los estudiantes liderados por Paz y grupos que, supuestamente, apoyaban la continuidad de la anterior gestión.
Los efectivos policiales desplazados hasta el lugar tuvieron que lanzar otra vez gases lacrimógenos por los alrededores de la UPEA, con el consiguiente perjuicio de los vecinos de Villa Esperanza.
El dirigente de la Federación Universitaria Local (FUL), Álex Paz, explicó a la red ATB que Zelada fue acusado de cometer irregularidades en la administración de fondos y que la nueva autoridad tendrá la responsabilidad de investigar la denuncia.
Desde la anterior semana hubo interrupción de las clases por las protestas organizadas por los opositores del anterior Rector. La situación se desbordó el miércoles, día en que los manifestantes tomaron por la fuerza el Rectorado.
Hubo destrucción de muebles y rotura de vidrios, pese a la intervención de la Policía, que utilizó agentes químicos para dispersar a los universitarios. Este jueves, luego de la salida de Zelada, también hubo enfrentamientos con palos y piedras entre los estudiantes liderados por Paz y grupos que, supuestamente, apoyaban la continuidad de la anterior gestión.
Los efectivos policiales desplazados hasta el lugar tuvieron que lanzar otra vez gases lacrimógenos por los alrededores de la UPEA, con el consiguiente perjuicio de los vecinos de Villa Esperanza.
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