“Los estudiantes deben reflexionar y llegar a un consenso para nombrar a un nuevo centro de estudiantes para que esta carrera sea vigilada por la CUB, y algunas instituciones que pueden darle amplia transparencia, legalidad y legitimidad a este centro”, mencionó Calancha, a tiempo de asegurar que la mejor salida para solucionar este conflicto, es que el estamento máximo de la CUB pudiera hacer una nueva elección, vigilada por un nuevo comité.
Calancha explicó que el problema ocasionado por los estudiantes de Arquitectura ni siquiera tiene un justificativo lógico, ya que la universidad tiene sus propias normas que establecen claramente quién debe llamar a elecciones y cómo tiene que hacerlo.
Con relación a la función del rectorado en este conflicto, la Defensora del Pueblo de Oruro manifestó que éste no tiene ninguna competencia para legalizar a un centro de estudiantes, y que esta es una función del consejo universitario. Por otra parte criticó duramente que se haya desembolsado presupuesto para realizar dos elecciones distintas con un mismo fin.
“En cuanto a desembolsar dineros de la universidad para las elecciones de un centro u otro, me parece un desacierto, puesto que eso es como reconocer a los dos, y finalmente la universidad no estaría trabajando responsablemente en la administración de sus recursos económicos”, dijo.
“La universidad está pasando por una crisis, hay un caos en todo Bolivia, no tenemos que olvidarnos que la universidad es la palestra de las ideas del pensamiento y debiera ser contestataria a los problemas sociales emergentes que estamos viviendo”, finalizó.
Con relación a la función del rectorado en este conflicto, la Defensora del Pueblo de Oruro manifestó que éste no tiene ninguna competencia para legalizar a un centro de estudiantes, y que esta es una función del consejo universitario. Por otra parte criticó duramente que se haya desembolsado presupuesto para realizar dos elecciones distintas con un mismo fin.
“En cuanto a desembolsar dineros de la universidad para las elecciones de un centro u otro, me parece un desacierto, puesto que eso es como reconocer a los dos, y finalmente la universidad no estaría trabajando responsablemente en la administración de sus recursos económicos”, dijo.
“La universidad está pasando por una crisis, hay un caos en todo Bolivia, no tenemos que olvidarnos que la universidad es la palestra de las ideas del pensamiento y debiera ser contestataria a los problemas sociales emergentes que estamos viviendo”, finalizó.
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