jueves, 29 de abril de 2010

SAN FRANCISCO XAVIER EN ÉPOCA ELECTORAL Se calienta la campaña en torno al Rectorado

Se calienta la carrera electoral por el Rectorado de San Francisco Xavier. Ayer, una acusación del candidato Iván Arciénega contra su par, Wálter Arízaga, calentó los ánimos de ambos contendientes y sus seguidores. Ambos candidatos a Rector advirtieron con llevar el asunto ante el Comité Electoral e incluso al Ministerio Público.

Ayer, a media mañana, el candidato Iván Arciénega se presentó en la plaza 25 de Mayo acompañado de la universitaria Giselle Calderón para denunciar que la noche del martes, un grupo de estudiantes encabezado por el también aspirante a rector, Wálter Arízaga, supuestamente había agredido a un par de alumnos que ponían afiches y banderas en inmediaciones del edificio de Contaduría Pública.

"Estamos haciendo denuncia formal al Comité Electoral y una representación jurídica, porque no es justo que una persona atribuyéndose poderes falsos e injustos se atreva a agredir a otra persona. Desde este punto de vista rechazamos que haya hecho una agresión física cobarde a una compañera y a un compañero", dijo, molesto, Arciénega.

Calderón relató que a eso de la 1:00 de ayer, el candidato y su gente llegaron en tres vagonetas y "patearon" a uno de sus compañeros al sorprenderlo pegando afiches, y a ella, Arízaga le habría tirado en el cuerpo el bote de engrudo que sostenía, aseguró.

Unos minutos después, Wálter Arízaga también llegó a la plaza para rebatir esa acusación. Negó rotundamente el hecho y dijo que la denuncia era una "canallada de Iván Arciénega" al sentirse perdidoso. Sostuvo también que Arciénega inició una campaña de acusaciones relacionadas con su pasado político y hasta lo culpó de que lo ligaran al Movimiento Al Socialismo (MAS). "Él sabrá si es o no es del MAS y la población sabe a dónde pertenece, lo que no puedo permitir es esta canallada. Por eso he venido hasta acá para encontrarlo y de frente que me diga", dijo Arízaga quien no pudo encontrase con su acusador.

Arízaga afirmó que un grupo contrario a su campaña fue encontrado destruyendo sus afiches, a lo que sus seguidores reaccionaron, pero enfatizó que él no participó de ninguna agresión. Aclaró que enterado de la situación, llegó a la media hora al lugar de los hechos y sólo encontró un automóvil celeste y a una "señorita diciendo que le habían quitado el engrudo".

Ambos candidatos se encontraron después, en la Facultad de Enfermería, y prefirieron "dejarlo todo así"; de acuerdo con la versión de algunos estudiantes, conversaron un momento para luego despedirse cordialmente.

En la mañana, ambos habían amenazado con recurrir ante el Comité Electoral y hasta al Ministerio Público. Sin embargo, de acuerdo con la información proporcionada desde el Comité Electoral, hasta las 18:00 de ayer, a esa instancia no se presentó ninguna acusación.

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