Durante la época de auge de la minería boliviana, la Escuela de Minas de Oruro, fue creada con el propósito de motivar a jóvenes estudiantes para que sigan una carrera técnica y egresen como agrimensores, laboreros o técnicos de minas. A partir de 1909 se titularon los primeros profesionales, posteriormente (1912) se amplía el pensum de estudios precisamente para incentivar a quienes ya tenían una carrera técnica, prosiguieran estudios con la especialidad de Ingenieros. La precursora fue Ingeniería de Minas, los primigenios en titularse: Adolfo Siles y Máximo Cladera, posteriormente se creó la carrera de Ingeniería Civil (1945) y así sucesivamente se fueron abriendo nuevas carreras, como Metalurgia, Procesos Químicos, Eléctrica-Electrónica, Mecánica-Electromecánica, Geología, Sistemas e Informática e Industrial.
Gran parte de estos reconocidos profesionales de acuerdo a su formación académica, atraídos por la música clásica de los 50, dejaban escuchar los discos de vinilo a través de un programa en Radio Universidad, a cargo de la Dra. Graciela Valdivia de Vildoso, hasta hoy la única mujer que ocupó ese cargo. Carlos Decker-Molina, recordaba sus libretos para el segmento denominado "La hora cultural" a cargo de un grupo de alumnos de la FNI, hasta los años 70.
No solo se escuchaba música, el Centro de Estudiantes también se preocupaba porque los alumnos se solazaran con las lecturas de la Biblioteca que no exclusivamente guardaba en sus anaqueles diarios, revistas y libros técnicos, los ex decanos habían adquirido algunas obras de la literatura universal, como el "Quijote de la Mancha" de Miguel de Cervantes Saavedra, "Los miserables" de Víctor Hugo, además de Quevedo.
Otra fuente del saber, a la que la mayoría de los alumnos se habituaba, al conocimiento, como parte de su formación y educación, por lo tanto la escritura acompañó y abrió las puertas a unos breves ensayos, con el tiempo se fueron convirtiendo en lecturas necesarias e incluso fueron premiadas como sucedió con "La oscuridad Radiante" y "El Ocaso de Orión" de Oscar Uzín Fernández ex secretario del CEI y ex docente de Inglés. Renunció para seguir su vocación de sacerdote, consideró prioritario transmitir la palabra de Dios.
La vida universitaria de la Facultad Nacional de Ingeniería, no solo eran los números, a la par de los estudios, el deporte también conseguía satisfacciones, los alumnos en las diferentes disciplinas entregaban no solamente el alma, también el corazón, y creció el Club Ingenieros. Un protagonista de la materia de Gimnasia de la Universidad fue el reconocido profesor Eduardo Leclere Polo, con el aval del H. Consejo Universitario fue contratado en abril de 1940. Ello motivó para que posteriormente la FNI pueda contar con un espacio donde habían diferentes equipos de gimnasia, que en los años ochenta estaban a cargo del profesor Félix Ovando.
Los actos académicos realizados una vez al año, eran fortaleza de ejemplo, se contaba con personalidades que eran alumnos, posteriormente se destacaban como docentes. El año 1957, alumnos e invitados especiales como Manolo von Borries, Salim Afchá, Sara Ismael Musa (Profesora de piano), Fernando Berthín Amengual (Administrativo FNI. culminó y se graduó como abogado, poeta y autor del Himno a la Facultad de Derecho) Olga Lazcano (Profesora de Piano y Soprano), una demostración de arte musical, recibida con elogios y aplausos, celebraba 51 años de vida institucional.
Esos homenajes motivaron para que otros alumnos sean reconocidos por sus méritos a la investigación, al arte, la música y las letras.
Inmersos en la historia de la FNI, está el Ing. Jesús Dávalos Méndez, miembro de Número de la Ilustre Sociedad de Geografía e Historia del Beni, presidente de la Academia Boliviana de Letras; quien ingresó a la FNI el año 1956 y se tituló en 1960. Escribió un ensayo sobre el ejercicio profesional del ingeniero, sobresaliendo los capítulos de Ingenieros Notables, los precursores coloniales 1715-1803 y el período republicano.
Enrique Sánchez Narváez, obtuvo el premio en un concurso convocado por el CEI, al componer el Himno a la FNI, con la ayuda del Coro de la Academia de Música "María Luisa Luzio". Posteriormente las partituras fueron extraviadas y nunca más se lo cantó. En la gestión del rector Héctor Ormachea Zalles, Sánchez Narváez fue catedrático de la materia Publicidad del primer programa de Periodismo el año 1947 en la UMSA.
Oscar Dávila Miguel, ingeniero metalurgista, fue gerente del Convenio UTO-BID, organizó en Oruro, el primer Simposio Internacional de Concentración de Estaño, llevaron adelante la FNI y Comibol, desde el 11 al 4 de octubre de 1966. Escribió un artículo en su Revista "Minería Boliviana" de interés para la International Tin Council, sus manuscritos "Espirales de Viento" una historia novelada de la minería en Bolivia, fueron escritos en México. Falleció en el país azteca, exactamente cuando su obra fue aprobada para su impresión en la editorial Muela del Diablo, La Paz-Bolivia. Sus beneficios sociales los donó a la FNI.
Rodolfo Pinto Parada (Ing. Civil) miembro de la Sociedad de Historia de Bolivia, escribió la novela Arreando desde Mojos, Pueblo de Leyenda, Rumbo al Beni y Narasaquije (20 lecciones de Historia del Beni).
Felipe Coronado Pando, tiene un manifiesto sobre Ecología y Pueblos Andinos, desde hacen años está a su cargo un equipo de estudio.
Oswaldo Arce (Ing. Minas) ha publicado interesantes artículos sobre la Minería en el periodo colonial y la minería durante la República.
Historia relatada por el Padre Antonio Barba y el origen de la minería en Potosí.
Miguel Vargas Mújica (+), Ing. de Minas, escribió "Oruro hacia el año 2001" (1993) y "Madre Natura y las Montañas de Oruro".
Luis Urquieta Molleda (Ing. Civil), director del suplemento literario "El Duende" y presidente de la Fundación Zofro, ha escrito "Sol de Otoño", un libro condensado de los anuarios publicados por la Unión Nacional de Poetas y Escritores Filial Oruro.
Otros docentes y alumnos han publicado literatura técnica de gran valía, en ocasiones se ha reeditado y traducido del inglés y alemán al castellano: Ingenieros Jorge Knoepflmacher W., Fernando Gundlach, José Cossio Soto, José Habetswallner S., Maiwald, Taborga, Alberto Balanza, Edmundo Mirones, Jaime Baptista, Cleómedes Campuzano, Josermo Murillo Molina, Juan Vargas Gallardo, Juan E. Joffré.
La mayoría de los Docentes de la Carrera de Metalurgia tienen el grado de Doctor, otros han emigrado, sin embargo aún existe comunicación con los ex alumnos que también han obtenido especialidades en el exterior, como los doctores Saúl J. Escalera, Antonio Salas Casado, Gróver Gutiérrez Blanco, Gerardo Zamora Echenique, ingenieros Edgar Venegas Ledo, Octavio Hinojosa, Napoleón Jacinto Eulate, Cinda Beltrán O., Carlos Velasco Hurtado, Jorge Gutiérrez Venegas, Juan Carlos Montaño Nemer, entre otros.
Todos los directores consecuentes con las publicaciones de la Revista Metalúrgica editada desde 1974, amalgaman trabajos de gran valía.
Docentes de Ingeniería Eléctrica han volcado su potencial para escribir libros técnicos y son: Ramiro Aduviri Velasco, Armengol Blanco Benito, Lázaro Andia Fuentes, Guillermo Guevara Arnez, Alfredo Vargas Oroza.
Las profesoras de inglés que a través de un convenio y beca culminaron una especialidad en Inglaterra y lograron escribir libros dirigidos a alumnos que dentro la currícula está la materia de inglés británico y que también sirve para cursos extracurriculares en la FNI Lic. Aida Mercado Castellón, Lourdes Forest de Tórrez y Angélica Garfias de Tejerina.
Docentes que aportaron con sus escritos otros recursos que favorecen a los alumnos: Pablo Gutiérrez Urzagaste, Alfredo Vargas Oroza, Miguel Vargas Mujica, Jaqueline Herrera Córdova, Víctor Hugo Campos Rosales, Jaime Morando.
También han escrito los ingenieros Jaime Burgos Manrique, Juan Mendoza, Nicanor Mamani, Fernando Pool T., Germán Herrera Dalence, Edilberto Lucio Salgado Ari, Carlos Balderrama Vásquez, Julio César Bermúdez, Nelson Tapia, Freddy Zambrana R., Jorge Amusquivar. Víctor Ríos es coordinador de la Revista Científica de esta Casa Superior de Estudios. En gestiones del CEI aportaron con publicaciones de especialidad como Edwin Iván Vigabriel Montero para el área de Ingeniería Civil. Eloy Villán y Primo Soruco editaron un texto de remembranza de la Facultad Nacional de Ingeniería titulada "Hacia el Centenario". Si bien el conocimiento y la práctica de las matemáticas en la generalidad de las carreras de la FNI, se ha impuesto, algunos docentes identificados como el arte plástico, las letras y música. Han manifestado su pasión como Hugo Murillo Benich, ingeniero de Minas, pintor y escritor, sus obras de arte han sido expuestas en el Congreso de Brasilea, realizó trabajo gráfico con ilustraciones e historietas para periódicos como Le Soir de Bélgica, L´Aurore de París-Francia y para la Features Service of the Press Association Ltd. de Londres. Ganador de varios premios literarios.
Edwin Auza cantautor y Jorge Flores pintor y dibujante de historietas argentinas, fue grata su presencia en las aulas de la FNI.
También rememoramos a Jorge Baldiviezo Menacho que estaba a cargo del "Boletín del Cristo Universitario", católico confeso siempre a la defensiva de guiar por el camino del bien y corregir los males, abandonó sus estudios para enrolarse a las filas de las guerrillas, al final fue integrante del partido del MIR, falleció junto a otros integrantes en la calle Harrington de la ciudad de La Paz.
Carlos Barragán Vargas, ex rector y ex senador, alentado por la fuerza vital de esta tierra y por los personajes del Carnaval cuyos símbolos no tienen epílogo, escribió un cuento sobre "El Carnaval de Oruro", publicación de la Misión de Cooperación Técnica Holandesa.
Héctor Córdova Eguívar, ganó un premio mundial en Ginebra al haber presentado el trabajo escrito sobre "Pedagogía Universitaria".
En música también se ha obtenido un valioso aporte con la "Tuna de Ingeniería", algunos integrantes aún permanecen y otros se han retirado: rubricaron el Acta de Fundación: Director, Hernán Herrera Dalence; codirector general, Eddy Nisttahuz Quisbert; secretario de finanzas, Alfredo Vargas Oroza; secretario de vinculación, Julio César Rodríguez; directores artísticos la alumna Marcela Tórrez Sahonero y como invitado Jesús Elías Lucero.
Las composiciones del Ing. Félix Castañares Arce y Roly Fernández, con inspiraciones dedicadas a la FNI fueron plasmadas en CDs, Carlos Fernández con el denominativo "El Visconti", en homenaje a un dúo argentino, es recordado entre sus colegas.
La publicación mensual "Nace La Luz" dirigida por el Ing. Nelson Ortiz Rodríguez y la Lic. Glenda Peláez Mamayeff son documentos de investigación, de análisis, trabajos que logran elogiosos comentarios, las ocasiones que se presentan dedican un espacio para rendir homenaje a la FNI.
La sala de recreo del Internado José M. Cossío, poseía una valiosa colección de discos de vinilo de 33 RPM-12 de música clásica como la Orquesta de Ópera de Viena, Sinfonía No. 7 en la menor op. 12, de Beethoven, Tchaikovsky Suites de Ballet y otros.
Desde su creación, el Centro de Estudiantes de la FNI acumuló historia a través de los documentos, lamentablemente durante la dictadura del año 1971, muchos archivos fueron incinerados. Lo que se recobró, una parte está impresa en el libro del centenario y otra está inédita, probablemente con el tiempo se ha de completar sus memorias.
Esta nueva huella marca 109 años de vida de la gloriosa Facultad, su reminiscencia se enriquece para perpetuarse a través de los profesionales que se han honrado al formarse académicamente en la Facultad Nacional de Ingeniería.
Quienes de una u otra forma tenemos un lazo que nos une a la FNI, desde el punto geográfico que nos encontremos, hemos de exclamar al unísono: "Cálculo, Precisión y Simetría, ¡Adelante
Ingeniería!
Fuentes: Archivo FNI.
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